A MI MADRE, SANTA MARÍA
Madre Santa, Virgen Humilde,
Madre de Dios y Madre nuestra,
Bendita Tú, entre todas las mujeres,
Bendito siempre el Fruto de tu vientre, Jesús.
Aceptaste cumplir la Voluntad de Dios,
Obediente,
en la Alegría y en el
Sufrimiento,
desde el Amor de la Concepción a la Cruz de la Salvación.
Madre, de Fe acompañada,
Intercesora ante el Padre,
no desoigas nuestras súplicas,
ante las necesidades que te presentamos
Ruega a Dios por
nosotros, pecadores,
Por nuestras acciones u omisiones y
haznos llegar hasta
tu Hijo, con espíritu de Penitencia,
para recibir su
Perdón y Ayúdanos para nunca nos apartemos de Él.
En este mes de Mayo, dedicado a Ti,
Queremos darte gracias por Tus Cuidados,
por Tus Atenciones, por Tu Servicio,
por Tu Dedicación a Dios
en la Sagrada Familia,
y por Hacernos más llevadera la Cruz…
¡Gracias, Madre, protégenos!
Que miles de Rosarios y Santas Romerías te ofrezcamos,
especialmente, por
tu Caridad hacia nosotros. Así sea.
(miguel LMC)
Nuestra Sra. de Consolación y Correa. José Vergara 1760 |
Cada día del mes de mayo tiene que ser una flor para María
ResponderEliminarEn este mes bendito procuraremos cultivar en nuestros corazones la humildad, modesta flor que te es tan querida, y con tu auxilio llegaremos a ser puros, humildes, caritativos, pacientes y esperanzados.
¡Oh María! haz producir en nuestros corazones todas estas amables virtudes; que ellas broten, florezcan y den al fin frutos de gracia, para que podamos ser algún día dignos hijos de la mas Santa y la mejor de las Madres. Amén.
(Donoso Brandt)