SAN AGUSTIN

¿Cómo aprender Humildad? ¡Sólo con humillaciones!
(Beata Teresa de Calcuta)

...Llenaos primero vosotros mismos; sólo así podréis dar a los demás. (San Agustín)

Dios no pretende de mí que tenga éxito. Sólo me exige que le sea fiel.
(Beata Teresa de Calcuta)

GOTA

... lo que hacemos es tan solo una gota en el mar, pero el mar sería menos si le faltara esa gota.
(Beata Teresa de Calcuta)

Contento, Señor, Contento (San Alberto Hurtado)

...y ESO ES LA SANTIDAD, DEJAR QUE EL SEÑOR ESCRIBA NUESTRA HISTORIA... (Papa Francisco)

«No ser, no querer ser; pisotear el yo, enterrarlo si posible fuera...».
(Santa Ángela de la Cruz)

Reconoce cristiano, tu dignidad, que el Hijo de Dios se vino del Cielo, por salvar tu alma. (San León Magno)

domingo, 29 de mayo de 2016

CORPUS CHRISTI:LO QUE TODO CRISTIANO DEBE SABER

¡Oh banquete precioso y admirable!
Santo Tomás de Aquino
Opúsculo 57, en la fiesta del Cuerpo de Cristo 1-4
El Hijo único de Dios, queriendo hacernos partícipe de su divinidad, tomó nuestra naturaleza, a fin de que hecho hombre, divinizase a los hombres.
Además, entregó por nuestra salvación todo cuan tomó de nosotros. Porque, por nuestra reconciliación ofreció, sobre el altar de la cruz, su cuerpo como víctima a Dios, su Padre, y derramó su sangre como precio de nuestra libertad y como baño sagrado que nos lava, para que fuésemos liberados de una miserable esclavitud y purificados de todos nuestros pecados.
Pero, a fin de que guardásemos por siempre jamás en nosotros la memoria de tan gran beneficio, dejó a los fieles, bajo la apariencia de pan y de vino, su cuerpo, para que fuese nuestro alimento, y su sangre, para que fuese nuestra bebida.
¡Oh banquete precioso y admirable, banquete saludable y lleno de toda suavidad! ¿Qué puede haber, en efecto, más precioso que este banquete en el cual no se nos ofrece, para comer, la carne de becerros o de machos cabríos, como se hacía antiguamente, bajo la ley, sino al mismo Cristo, verdadero Dios?
No hay ningún sacramento más saludable que éste, pues por él se borran los pecados, se aumentan las virtudes y se nutre el alma con la abundancia de todos los dones espirituales.
Se ofrece, en la Iglesia, por los vivos y por los difuntos para que a todos aproveche, ya que ha sido establecido para la salvación de todos.
Finalmente, nadie es capaz de expresar la suavidad de este sacramento, en el cual gustamos la suavidad espiritual en su misma fuente y celebramos la memoria del inmenso y sublime amor que Cristo mostró en su pasión.
Por eso, para que la inmensidad de este amor se imprimiese más profundamente en el corazón de los fieles, en la última cena, cuando, después de celebrar la Pascua con sus discípulos, iba a pasar de este mundo al Padre, Cristo instituyó este sacramento como el memorial perenne de su pasión, como el cumplimiento de las antiguas figuras y la más maravillosa de sus obras; y lo dejó a los suyos como singular consuelo en las tristezas de su ausencia.


10 cosas 

que todo cristiano debe saber del

 Corpus Christi

REDACCIÓN CENTRAL, 26 May. 16 / 04:02 am (ACI).- A lo largo de los siglos la Iglesia y los santos han animado a los fieles a amar la Eucaristía, e incluso hay quienes han dado su vida por protegerla. Hoy en la Solemnidad del “Corpus Christi” te presentamos 10 cosas que todo cristiano de saber en torno a este gran milagro:


1. Jesús instituyó la Eucaristía
Jesús reunido con sus apóstoles en la última cena instituyó el sacramento de la Eucaristía: “Tomen y coman; esto es mi cuerpo…” (Mt, 26, 26-28). De esta manera hizo partícipes de su sacerdocio a los apóstoles y les mandó que hicieran lo mismo en memoria suya.
2. Eucaristía significa "Acción de gracias"
La palabra Eucaristía, derivada del griego ε?χαριστ?α (eucharistía), significa "Acción de gracias" y se aplica a este sacramento porque nuestro Señor dio gracias a su Padre cuando la instituyó. Además, porque el Santo Sacrificio de la Misa es el mejor medio de dar gracias a Dios por sus beneficios.
3. Cristo se encuentra de forma íntegra en el Sacramento del Altar
El Concilio de Trento (siglo XVI) define claramente: "En el Santísimo Sacramento de la Eucaristía se contiene verdadera, real y sustancialmente el Cuerpo y Sangre de nuestro Señor Jesucristo, juntamente con su Alma y Divinidad. En realidad Cristo íntegramente". Asimismo, en el Derecho Canónico de la Iglesia ninguna otra festividad recibe tanta atención como la Solemnidad del Corpus Christi.
4. Los sucesores de los apóstoles convierten el pan y el vino en Cuerpo y Sangre de Cristo
En la Santa Misa, los obispos y sacerdotes convierten realmente el pan y el vino en el Cuerpo y Sangre de Cristo durante la consagración; el proceso es llamado Transubstanciación. La Solemnidad del Corpus Christies una de las cinco ocasiones en el año en que un Obispo no puede estar fuera de su diócesis, salvo por una urgente y grave razón.
5. Se debe recibir la Eucaristía al menos una vez al año
La Comunión es recibir a Jesucristo sacramentado en la Eucaristía. La Iglesia manda comulgar al menos una vez al año, en estado de gracia, y recomienda la comunión frecuente. Es muy importante recibir la Primera Comunión cuando se llega al uso de razón, con la debida preparación.
6. Para comulgar se necesita del ayuno eucarístico y confesarse
El ayuno eucarístico consiste en abstenerse de tomar cualquier alimento o bebida, al menos desde una hora antes de la Sagrada Comunión, a excepción del agua y las medicinas. Los enfermos y sus asistentes pueden comulgar aunque hayan tomado algo en la hora inmediatamente anterior. El que comulga en pecado mortal comete un grave pecado llamado sacrilegio. El que desea comulgar y está en pecado mortal no puede recibir la Comunión sin haber acudido antes al sacramento de la Penitencia, pues no basta el acto de contrición.
7. Es Mandamiento de la Iglesia asistir a Misa domingos y días de precepto
Frecuentar la Santa Misa es un acto de amor a Dios que debe brotar naturalmente de cada cristiano. Es también obligatorio asistir los domingos y feriados religiosos de precepto, a menos que se esté impedido por una causa grave.
8. La Eucaristía es alimento espiritual para enfermos y agonizantes
La Eucaristía en el Sagrario es un signo por el cual Nuestro Señor está constantemente presente en medio de su pueblo y es alimento espiritual para enfermos y moribundos. Se le debe agradecimiento, adoración y devoción a la real presencia de Cristo reservado en el Santísimo Sacramento.
9. La fiesta del Corpus Christi se celebra el jueves posterior al domingo de la Santísima Trinidad
La Solemnidad del Corpus Christi fue establecida en 1246 por el Obispo Roberto de Thorete y a sugerencia de Santa Juliana de Mont Cornillon. Después del milagro eucarístico de Bolsena, a mediados del Siglo XIII, el Papa Urbano IV expandió esta celebración a toda la Iglesia Universal en 1264 con la bula “Transiturus”, fijándola para el jueves posterior al domingo de la Santísima Trinidad. El Pontífice encomendó a Santo Tomás de Aquino que compusiera un oficio litúrgico propio e himnos que se entonan hasta nuestros días.
10. También es posible celebrarla el domingo posterior a la Santísima Trinidad 
En el Vaticano, el Corpus Christi se celebra el jueves después de la Solemnidad de la Santísima Trinidad. Mientras que en varias diócesis se traslada al domingo posterior a la Santísima Trinidad por una cuestión pastoral. El Papa San Juan Pablo II fue quien llevó la procesión anual del Corpus Christi de la Plaza de San Pedro a las calles de Roma.

HISTORIA DE LA SOLEMNIDAD DEL CPORPUS CHRISTI

A fines del siglo XIII surgió en Lieja, Bélgica, un Movimiento Eucarístico cuyo centro fue la Abadía de Cornillón fundada en 1124 por el Obispo Albero de Lieja. Este movimiento dio origen a varias costumbres eucarísticas, como por ejemplo la Exposición y Bendición con el Santísimo Sacramento, el uso de las campanillas durante la elevación en la Misa y la fiesta del Corpus Christi.
Santa Juliana de Mont Cornillón, por aquellos años priora de la Abadía, fue la enviada de Dios para propiciar esta Fiesta. La santa nace en Retines cerca de Liège, Bélgica en 1193. Quedó huérfana muy pequeña y fue educada por las monjas Agustinas en Mont Cornillon. Cuando creció, hizo su profesión religiosa y más tarde fue superiora de su comunidad. Murió el 5 de abril de 1258, en la casa de las monjas Cistercienses en Fosses y fue enterrada en Villiers.
Desde joven, Santa Juliana tuvo una gran veneración al Santísimo Sacramento. Y siempre anhelaba que se tuviera una fiesta especial en su honor. Este deseo se dice haber intensificado por una visión que tuvo de la Iglesia bajo la apariencia de luna llena con una mancha negra, que significaba la ausencia de esta solemnidad.
Juliana comunicó estas apariciones a Mons. Roberto de Thorete, el entonces obispo de Lieja, también al docto Dominico Hugh, más tarde cardenal legado de los Países Bajos y a Jacques Pantaleón, en ese tiempo archidiácono de Lieja, más tarde Papa Urbano IV.
El obispo Roberto se impresionó favorablemente y, como en ese tiempo los obispos tenían el derecho de ordenar fiestas para sus diócesis, invocó un sínodo en 1246 y ordenó que la celebración se tuviera el año entrante; al mismo tiempo el Papa ordenó, que un monje de nombre Juan escribiera el oficio para esa ocasión. El decreto está preservado en Binterim (Denkwürdigkeiten, V.I. 276), junto con algunas partes del oficio.
Mons. Roberto no vivió para ver la realización de su orden, ya que murió el 16 de octubre de 1246, pero la fiesta se celebró por primera vez al año siguiente el jueves posterior a la fiesta de la Santísima Trinidad. Más tarde un obispo alemán conoció la costumbre y la extendió por toda la actual Alemania.
El Papa Urbano IV, por aquél entonces, tenía la corte en Orvieto, un poco al norte de Roma. Muy cerca de esta localidad se encuentra Bolsena, donde en 1263 o 1264 se produjo el Milagro de Bolsena: un sacerdote que celebraba la Santa Misa tuvo dudas de que la Consagración fuera algo real. Al momento de partir la Sagrada Forma, vio salir de ella sangre de la que se fue empapando en seguida el corporal. La venerada reliquia fue llevada en procesión a Orvieto el 19 junio de 1264. Hoy se conservan los corporales -donde se apoya el cáliz y la patena durante la Misa- en Orvieto, y también se puede ver la piedra del altar en Bolsena, manchada de sangre.
El Santo Padre movido por el prodigio, y a petición de varios obispos, hace que se extienda la fiesta del Corpus Christi a toda la Iglesia por medio de la bula "Transiturus" del 8 septiembre del mismo año, fijándola para el jueves después de la octava de Pentecostés y otorgando muchas indulgencias a todos los fieles que asistieran a la Santa Misa y al oficio.
Luego, según algunos biógrafos, el Papa Urbano IV encargó un oficio -la liturgia de las horas- a San Buenaventura y a Santo Tomás de Aquino; cuando el Pontífice comenzó a leer en voz alta el oficio hecho por Santo Tomás, San Buenaventura fue rompiendo el suyo en pedazos.
La muerte del Papa Urbano IV (el 2 de octubre de 1264), un poco después de la publicación del decreto, obstaculizó que se difundiera la fiesta. Pero el Papa Clemente V tomó el asunto en sus manos y, en el concilio general de Viena (1311), ordenó una vez más la adopción de esta fiesta. En 1317 se promulga una recopilación de leyes -por Juan XXII- y así se extiende la fiesta a toda la Iglesia.

Ninguno de los decretos habla de la procesión con el Santísimo como un aspecto de la celebración. Sin embargo estas procesiones fueron dotadas de indulgencias por los Papas Martín V y Eugenio IV, y se hicieron bastante comunes a partir del siglo XIV.
La fiesta fue aceptada en Cologne en 1306; en Worms la adoptaron en 1315; en Strasburg en 1316. En Inglaterra fue introducida de Bélgica entre 1320 y 1325. En los Estados Unidos y en otros países la solemnidad se celebra el domingo después del domingo de la Santísima Trinidad.
En la Iglesia griega la fiesta de Corpus Christi es conocida en los calendarios de los sirios, armenios, coptos, melquitas y los rutinios de Galicia, Calabria y Sicilia.
Finalmente, el Concilio de Trento declara que muy piadosa y religiosamente fue introducida en la Iglesia de Dios la costumbre, que todos los años, determinado día festivo, se celebre este excelso y venerable sacramento con singular veneración y solemnidad; y reverente y honoríficamente sea llevado en procesión por las calles y lugares públicos. En esto los cristianos atestiguan su gratitud y recuerdo por tan inefable y verdaderamente divino beneficio, por el que se hace nuevamente presente la victoria y triunfo de la muerte y resurrección de Nuestro Señor Jesucristo.

SOLEMNIDAD DEL CORPUS CHRISTI

Cantemos al Amor de los amores,
cantemos al Señor.
¡Dios está aquí! Venid, adoradores;
adoremos a Cristo Redentor.

¡Gloria a Cristo Jesús! Cielos y tierra,
bendecid al Señor.
¡Honor y gloria a ti, Rey de la gloria;
amor por siempre a ti, Dios del amor!


ADORO TE DEVOTE 
Adoro te devote, latens deitas
 Quae sub his figuris vere latitas; 
Tibi se cor meum totum subjicit, 
Quia te contemplans, totum deficit. 
Visus, tactus, gustus in te fallitur, 
Sed auditu solo tuto creditur: 
Credo quidquid dixit dei filius; 
Nihil hoc verbo veritatis verius. 
In cruce latebat sola deitas, 
At hic latet simul et humanitas:
 Ambo tamen credens atque confitens, 
Peto quod petivit latro poenitens. 
Plagas, sicut Thomas, non intueor, 
Deum tamen meum te confiteor;
 Fac me tibi semper magis credere, 
In te spem habere, te diligere. 
O memoriale mortis Domini, 
Panis vivus, vitam praestans homini, 
Praesta meae menti de te vivere, 
Et te illi semper dulce sapere. 
Pie pellicane Iesu Domine, 
Me immundum munda tuo sanguine, 
Cuius una stilla salvum facere 
Totum mundum quit ab omni scelere.
Iesu, quem velatum nunc aspicio 
Oro fiat illud, quod tam sitio: 
Ut te revelata cernens facie, 
Visu sim beatus tuae gloriae. Amen. 


TE ADORO CON DEVOCIÓN 

Te adoro con devoción, Divinidad oculta, verdaderamente escondido bajo estas apariencias. A ti se somete mi corazón por completo, y se rinde totalmente al contemplarte. La vista, el tacto, el gusto, se equivocan sobre ti, pero basta con el oído para creer con firmeza. Creo todo lo que ha dicho el Hijo de Dios: nada es más cierto que esta palabra de Verdad. En la Cruz se escondía sólo la divinidad, pero aquí también se esconde la humanidad; Creo y confieso ambas cosas, pido lo que pidió el ladrón arrepentido. No veo las llagas como las vio Tomás, pero confieso que eres mi Dios; Haz que yo crea más y más en Ti, que en Ti espere; que te ame. ¡Oh, memorial de la Muerte del Señor! Pan vivo que da la vida al hombre: Concédele a mi alma que de ti viva, y que siempre saboree tu dulzura. Señor Jesús, bondadoso pelícano, límpiame, a mí inmundo, con tu sangre, De la que una sola gota puede liberar de todos los crímenes al mundo entero. Jesús, a quien ahora veo oculto, te ruego que se cumpla lo que tanto ansío: Que al mirar tu rostro ya no oculto sea yo feliz viendo tu gloria. Amén. 

Misioneras de la Caridad en Adoración al Santísimo

Procesión del Corpus Christi. Málaga

Pange lingua, gloriosi
corporis mysterium,
sanguinisque pretiosi,
quem in mundi pretium
fructus ventris generosi
rex effudit gentium.

Nobis datus, nobis natus
ex intacta Virgine,
et in mundo conversatus
sparso verbi semine,
sui moras incolatus
miro clausit ordine.

In supremae nocte cenae
recumbens cum fratribus,
observata lege plene
cibis in legalibus,
cibum turbae duodenae
se dat suis manibus.

Verbum caro panem verbum
verbo carnem efficit
fitque sanguis Christi merum,
et, si sensus deficit,
ad firmandum cor sincerum
sola fides sufficit.

Tantum ergo Sacramentum 
Veneremur cernui: 
Et antiquum documentum 
Novo cedat ritui: 
Praestet fides supplementum 
Sensuum defectui.

Genitori, Genitoque 
Laus et jubilatio, 
Salus, honor, virtus quoque 
Sit et benedictio: 
Procedenti ab utroque 
Compar sit laudatio. Amen.

Estación a Jesús Sacramentado

V/-¡Viva Jesús Sacramentado!
R/-¡Viva y de todos sea amado!
Padrenuestro Avemaría y Gloria
(se repite tres veces ante el santísimo o cinco cuando hay exposición mayor -con custodia-)

Comunión espiritual:

Yo quisiera, Señor, recibios, 
con aquella pureza, humildad y devoción, 
con que os recibió vuestra Santísima Madre,
con el espíritu y fervor de todos los santos.

domingo, 22 de mayo de 2016

22 de MAYO FIESTA DE SANTA RITA . FAMILIA AGUSTINIANA




Santa Rita de Casia, (en italianoRita da Cascia), (* Roccaporena, 1381 - † Cascia1457),
 bautizada con el nombre de Margherita Lotti, es una de las santas más populares de la Iglesia católica. Su nombre es probablemente una abreviación de Margherita.
 Sus símbolos representativos son las rosas y los higos.
Rita nació en la aldea de Roccaporena, 5 km al oeste del pueblo de Cascia (provincia de Perugia, región de Umbría) en 1381 y falleció el 22 de mayo de 1457.
Nació de padres mayores. A pesar de que quería ser monja, cuando tenía 14 años de edad1 sus padres la casaron con un hombre del pueblo llamado Paolo Mancini. Su esposo le causó muchos sufrimientos, pero ella se consolaba en la oración y le devolvió su crueldad con bondad, logrando su conversión a Cristo con el paso de los años.
Tuvieron dos hijos mellizos, Jacobo y Paolo. Un día Mancini —que trabajaba como sereno de la aldea de Rocca Porena y tenía muchos enemigos por sus fechorías pasadas- fue emboscado y asesinado. Una vez viuda, pero aliviada ya que había logrado que Paolo muriera en paz, Rita pidió la admisión al convento agustiniano de Santa María Magdalena, en Cascia (establecido en1256). Pero no fue aceptada debido a que sólo se permitían vírgenes. Un año más tarde (1417) también murieron sus dos hijos púberes. Fallecieron ambos al mismo tiempo, de muerte natural. Rita los había preparado plenamente para encontrarse conCristo. Con un amor heroico por sus almas, le había suplicado que ambos adolescentes murieran, porque temía que estuvieran planeando vengar el asesinato de su padre (la ley de la vendetta). Habrían cometido así el pecado capital de la venganza, lo que hubiera condenado sus almas eternamente. Ambos se enfermaron y murieron, también pidiendo perdón a su madre por todos los dolores que le habían causado.
Ya sin obligaciones familiares, Rita fue aceptada en el convento, recibió los hábitos de monja, y más tarde realizó su profesión de fe. Tenía 36 años. En el convento, Rita se entregó a una vida de oración y penitencia.
ASTILLA DE LA CRUZ EN SANTA RITA
De acuerdo a la tradición en 1428, una madrugada Rita recibió de manos de Cristo una larga astilla de madera clavada en el hueso de la frente. Se trataba de un estigma divino: la marca de la corona de espinas que Jesucristo había exhibido en la cruz. Le extrajeron la astilla y la guardaron como reliquia sagrada. Cada madrugada el estigma se le volvía a abrir por sí mismo, hasta que empezó a expeler un fuerte olor inmundo, que se mantuvo milagrosamente el resto de su vida.
En 1453 Rita cayó en cama gravemente enferma. Desde ese momento, estando siempre atendida por novicias, la herida de su frente gradualmente se cerró, pero Rita pasó los últimos cuatro años de su vida con infecciones en la sangre.

Las rosas de Rita

Uno de los símbolos de santa Rita es la rosa. En su vejez, ella contaba que su marido le prohibía dar de comer a los pobres. Un día en que estaba saliendo de su casa con un pan bajo sus ropas, Mancini la confrontó y le quitó el vestido: pero el pan se había convertido milagrosamente en rosas. Esta historia también se cuenta que le sucedió a Santa Isabel de Portugal y a san Diego de Alcalá.
Al final de su vida, la visitó su prima de su aldea de Rocca Porena. Le preguntó si quería algo y Rita le pidió que le llevara una rosa del jardín del convento. En pleno invierno, la prima creyó que no encontraría nada, pero cuál no sería su sorpresa al encontrar un pimpollo de rosa. Se lo llevó a Rita. Esa rosa representaría el amor de Cristo hacia Rita, y la capacidad de Rita de interceder por las causas imposibles.
Generalmente se la pinta sosteniendo rosas, o con rosas apoyadas en el piso a sus pies. El día de su fiesta, el 22 de mayo, las iglesias de Santa Rita o las regentadas por laOrden de San Agustín, en todo el mundo, distribuyen rosas a los participantes devotos y durante la misa el sacerdote las bendice.

Las abejas de Santa Rita

Narra la leyenda que, inmediatamente después de ser bautizada, abejas blancas entraban y salían de la boca de Rita sin hacerle daño.
No se duda de que este episodio de las abejas pertenece a la primera tradición ritiana, pero no se lo considera necesariamente como un fenómeno sobrenatural. De todas el papa Urbano VIII manifestó un gran interés y, además de llevarlas en su escudo pontifical, se preocupó en persona de estudiar el comportamiento de esta especie de abejas que, al parecer, son únicas en el mundo. Urbano VIII, sabiendo lo de las misteriosas abejas, pidió que una de ellas le fuera llevada a Roma. Después de un cuidadoso examen, le ató un hilo de seda y la dejó libre. Esta se descubrió más tarde en su nido en el monasterio de Cascia, a 138 kilómetros de distancia.
Aún hoy, en el antiguo monasterio donde Rita vivió y murió como monja agustina, se encuentran a las abejas "murarias", llamadas así porque habitan en los muros. Aunque la devoción popular ha preferido llamarlas "abejas de Santa Rita" por haberlas relacionado con aquellas misteriosas abejas que rodearon su cuna pocos días después de su bautismo.
Pero en Casia las "abejas de santa Rita" no sólo viven en los muros del monasterio, sino que también junto a éste. Así lo ha querido la Beata Teresa de Casia (Madre Teresa Fasce) que en 1938 fundó la "colmena de Santa Rita", una obra donde niños carenciados reciben ayuda para crecer fuertes, y emprender luego el vuelo de la vida.
Según una tradición, desde que era bebé, mientras dormía en una cesta, abejas blancas se agrupaban sobre su boca, depositando en ella la dulce miel sin hacerle daño y sin que la niña llorara para alertar a sus padres. Uno de los campesinos, viendo lo que ocurría trató de dispersar las abejas con su brazo herido. Su brazo se sanó inmediatamente.
Después de 200 años de la muerte de Santa Rita, algo extraño ocurrió en el monasterio de Cascia. Las abejas blancas surgían de las paredes del monasterio durante Semana Santa de cada año y permanecían hasta la fiesta de Santa Rita, el 22 de mayo, cuando retornaban a la inactividad hasta la Semana Santa del próximo año. Los huecos en la pared, donde las abejas tradicionalmente permanecen hasta el siguiente año, pueden ser vistos claramente por los peregrinos que llegan hoy al monasterio.

Muerte[editar]

Cuerpo incorrupto de Santa Rita situado en la Basílica de Santa Rita en CasciaItalia.
Rita murió en el convento agustiniano el 22 de mayo de 1457 a la edad de 76 años. La gente se agrupó en el lugar para mostrar los últimos respetos a su cadáver, que emitía una intensa fragancia dulce (como si hubiera sido embalsamado). Su cuerpo se conserva hasta la actualidad (aunque muy deshidratado). Empezaron a correr rumores de que por intercesión de la monja, sucedían curaciones milagrosas. Así la devoción hacia Rita se extendió por toda Italia.

Canonización[editar]

Rita fue beatificada por el papa Urbano VIII en 1627, cuyo secretario privado Fausto Cardinal Poli había nacido a 15 km de Roccaporena, que había sido el lugar de nacimiento de Rita).
El 24 de mayo de 1900 fue canonizada por el papa León XIII.
La fiesta de Santa Rita es el 22 de mayo.

Patronazgos

Santa Rita es patrona de:
  • Las enfermedades
  • Las heridas
  • Los problemas maritales
  • Las causas imposibles
  • Las pérdidas
  • El abuso
  • Las madres
  • Los matrimonios
  • La familia
  • La paz
  • De los casos difíciles y desesperados
  • Las causas perdidas

A raíz de su beatificación, a principios del siglo XX se construyó un gran santuario de Santa Rita en Cascia, la Basílica de Santa Rita de Casia. Éste, y una casa en Rocaporena construida en el sitio donde se cree que estaba su casa natal, son los dos lugares de peregrinación más activos de Umbría.
En España se la llama la santa de los imposibles y abogada de sus causas.
Dicho Popular:
El origen del popular dicho comienza cuando una doncella poco agraciada le pidió un “imposible”: encontrar un hombre que se casara con ella y la quisiera. La santa le concedió el deseo a la joven que pronto encontró un novio, pero este finalmente rompió el compromiso con la doncella que le recriminó a la santa: ¡Santa Rita, Santa Rita, lo que se da no se quita!

SANTÍSIMA TRINIDAD




El Dios uno y trino,
misterio de amor,
habita en los cielos
y en mi corazón.

Dios escondido en el misterio,
como la luz que apaga estrellas;
Dios que te ocultas a los sabios,
y a los pequeños te revelas.

No es soledad, es compañía.
es un hogar tu vida eterna,
es el amor que se desborda
de un mar inmenso sin riberas.

Padre de todos, siempre joven,
al Hijo amado eterno que engendras,
y el Santo Espíritu procede
como el Amor que a los dos sella.

Padre, en tu gracia y tu ternura,
la paz, el gozo y la belleza,
danos ser hijos en el Hijo
y hermanos todos en tu Iglesia.

Al Padre, al Hijo y al Espíritu,
acorde melodía eterna,
honor y gloria por los siglos
canten los cielos y la tierra.



Luz, resplandor y gracia en la Trinidad y por la Trinidad
San Atanasio, obispo
Carta 1 a Serapión 28-30
Siempre resultará provechoso esforzarse en profundizar el 
contenido de la antigua tradición, de la doctrina y la fe 
de la Iglesia católica, tal como el Señor nos la entregó, 
tal como la predicaron los apóstoles y la conservaron 
los santos Padres. 

En ella, efectivamente, está fundamentada la Iglesia, 
de manera que todo aquel que se aparta de esta fe 
deja de ser cristiano y ya no merece el nombre de tal.

Existe, pues, una Trinidad, santa y perfecta, de la cual 
se afirma que es Dios en el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, 
que no tiene mezclado ningún elemento extraño o externo, 
que no se compone de uno que crea y de otro que es creado, 
sino que toda ella es creadora, es consistente por naturaleza, 
y su actividad es única. 

El Padre hace todas las cosas a través del que es su Palabra, 
en el Espíritu Santo. De esta manera, queda a salvo la unidad 
de la santa Trinidad. Así, en la Iglesia se predica un 
solo Dios, que lo trasciende todo, y lo penetra todo, y lo 
invade todo. 

Lo trasciende todo, en cuanto Padre, principio y 
fuente; lo penetra todo, por su Palabra; lo invade todo, 
en el Espíritu Santo.

San Pablo, hablando a los corintios acerca de los 
dones del Espíritu, lo reduce todo al único Dios Padre, 
como al origen de todo:

Hay diversidad de dones, pero un mismo Espíritu; 
hay diversidad de ministerios, pero un mismo Señor; 
y hay diversidad de funciones, pero un mismo Dios 
que obra todo en todos.

El Padre es quien da, por mediación de aquel que es su 
Palabra, lo que el Espíritu distribuye a cada uno. 
Porque todo lo que es del Padre es también del Hijo; 
por esto, todo lo que da el Hijo en el Espíritu es 
realmente don del Padre. 

De manera semejante, cuando el Espíritu está en nosotros, 
lo está también la Palabra, de quien recibimos el Espíritu, 
y en la Palabra está también el Padre, realizándose así 
aquellas palabras: El Padre y yo vendremos a él y 
haremos morada en él. Porque, donde está la luz, 
allí está también el resplandor; y, donde está el resplandor, 
allí está también su eficiencia y su gracia esplendorosa.

Es lo que nos enseña el mismo Pablo en su segunda carta 
a los Corintios, cuando dice: 

La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión 
del Espíritu Santo esté siempre con todos vosotros. 

Porque toda gracia o don que se nos da en la Trinidad se nos 
da por el Padre, a través del Hijo, en el Espíritu Santo. 
Pues, así como la gracia se nos da por el Padre, a través 
del Hijo, así también no podemos recibir ningún don si no es 
en el Espíritu Santo, ya que, hechos partícipes del 
mismo, poseemos el amor del Padre, la gracia del Hijo 
y la comunión de este Espíritu.

Andrea del Sarto : Debate sobre la Santísima Trinidad


Llenos de alegría, adoremos y glorifiquemos al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo:
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo
  • - Padre santo, a nosotros, que no sabemos pedir lo que nos conviene, dígnate darnos el Espíritu Santo,
    para que venga en ayuda de nuestra debilidad e interceda por nosotros según tú.
  • Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo
  • - Hijo de Dios, que pediste al Padre que diera a tu Iglesia el Defensor,
    haz que el Espíritu de la verdad esté siempre con nosotros.
  • Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo
  • - Ven, Espíritu Santo, y comunícanos tus frutos; el amor, la alegría, la paz, la comprensión, la servicialidad, la bondad,
    la lealtad, la amabilidad, el dominio de sí, la sobriedad, la castidad.
  • Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo
  • - Padre Todopoderoso, que enviaste a nuestros corazones el Espíritu de tu Hijo que clama "¡Abba, Padre!",
    haz que nos dejemos llevar por el Espíritu, para que seamos herederos tuyos y coherederos con Cristo.
  • Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo
  • - Cristo, que enviaste el Defensor, que procede del Padre, para que diera testimonio de ti,
    haz que nosotros también demos testimonio de ti ante los hombres.
  • Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo