La Madre ha dado a luz al Rey, cuyo nombre es eterno, y la que lo ha engendrado tiene, al mismo tiempo, el gozo de la maternidad y la gloria de la virginidad: un prodigio tal no se ha visto nunca ni se verá de nuevo jamás. Aleluya.
Ave Maria, Gratia plena , Dominus tecum, Benedictu in mulieribus et benedictus fructus ventris tui, Iesus.
Sancta Maria, Mater Dei, ora pro nobis, pecatoribus, nunc et in hora mortis.Amen
En este año que comenzamos, los propósitos de mejora aparecen, intentando solucionar los errores y faltas del año anterior. Pero no me engañaré, ante Santa María presento estos propósitos con la firme Esperanza en que Ella ayudará a que se cumplan. A su intercesión maternal ruego no me deje ante tanto por hacer.
miguel LMC
No hay comentarios:
Publicar un comentario